Si estás planteándote crear tu primera web para tu negocio de wedding planer probablemente te vengan muchas dudas a la cabeza. ¿Tengo suficiente con una One Page? ¿Necesito una web supercompleta de más de 10 páginas? ¿El blog realmente ha muerto?
Si tú también tienes estas dudas, quédate porque este post te interesa (y si eres más de ver vídeos que de leer, te dejo el enlace al vídeo de Youtube con este contenido aquí).
Unos consejos antes de empezar
Hoy te voy a explicar qué páginas necesitas de forma indispensable, de cuáles puedes prescindir por el momento y en qué momento dejarán de serlo. Antes de nada, ya te avanzo que no es suficiente con una One Page.
No estás vendiendo un producto físico o un servicio que se pueda arreglar o repetir si sale mal, el día de la boda de tus parejas uno y si sale mal no tiene solución. Tienes que conseguir que los novios confíen en ti lo suficiente como para dejar el día más importante de su vida en tus manos, si no les hablas lo suficiente y les demuestras que eres la indicada, ¿cómo esperas que lleguen a ese punto de fe ciega en ti?
Quiero que tengas presente otras dos cosas: lo primero, es que no comiences ni a organizar ni a diseñar tu página web hasta que tengas claros quién es tu cliente ideal, quién es esa pareja con la que estás deseando trabajar.
Tu web no tiene que hablar de ti, sino de ellos, de los novios a los que quieres emocionar hasta tal punto que dejen su boda en tus manos. Si no sabes quiénes son, no vas a ser capaz de idear una web que realmente los enamore y les haga tomar la decisión de dar el «Sí quiero» contigo.
El segundo punto que tienes que tener muy muy claro es qué servicios ofreces. A lo mejor piensas que me he vuelto loca diciéndote esto, pero no sabes la de veces que he vivido la situación con mis clientas de leer sus páginas de servicios y no entender cuál era la diferencia entre uno y otro.
Ten presente que la mayoría de veces esta es la primera boda de tus potenciales clientes. No saben qué diferencia hay entre una organización integral o una coordinación + decoración y, créeme, si no entienden qué les están ofreciendo, simplemente se irán a otra parte. Una mente confundida no compra.
Así que para un momento, explica en un papel qué incluye cada uno de tus servicios y analiza si alguien con 0 conocimientos sobre el sector nupcial entendería cuál es la diferencia y por qué le convendría más uno u otro.
Dicho esto, vamos allá.
Página de «Sobre mí»
Te parecerá mentira, pero esta es una de las páginas más importantes de tu web.
La página de «Sobre mí» tiene el objetivo de crear esa confianza tan necesaria. Te presenta como a una persona real y no simplemente un logo.
Piensa que los novios van a pasar contigo aproximadamente un año planificando su boda, necesitan saber que estarán a gusto contigo y que vuestra personalidad encajará.
En esta página te recomiendo que hables no solo de por qué eres la wedding planner indicada para ellos y tu formación y experiencia que lo avala, si no de cuáles son tus valores y de algunas curiosidades tuyas. Muéstrate cercana y auténtica, pero no te pases de demasiado personal, tiene que haber un balance.
No olvides incluir una imagen tuya de frente, sonriente y accesible, que invite a charlar contigo. De esta manera sentirán que les estás hablando directamente y te humanizarán.
Página de «Contacto»
¿De qué sirve que una pareja se haya visto tu web de pe a pa si luego no tiene cómo contactarte?
Para eso existe la página de contacto, pero no te limites a poner un formulario.
Mi recomendación es que incluyas una imagen tuya de frente (igual que en «Sobre mí»), un pequeño texto en el que les digas lo feliz que estás de que estén en esa página, porque eso significa que quieren hablar contigo, cuánto vas a tardar en contestarles si te envían el formulario y otras maneras de ponerse en contacto contigo.
A nuestro potencial cliente hay que ponerle las cosas fáciles y dejarle que nos contacte por donde él prefiera, así que ponle el enlace a las redes sociales donde te van a encontrar, tu mail, tu teléfono (enlazado a tu whatsapp) y tu horario de atención al cliente (y si no tienes un horario de atención al cliente, deberías establecerlo ya, darling).
Páginas de «Servicio(s)»
Aquí es donde está la chicha.
¿Cuántas páginas de servicios necesitas? ¡Depende!
Depende de los servicios que tengas.
Lo recomendable es una página por servicio, sobre todo en el caso de las wedding planners donde los tres servicios habituales (organización integral, decoración y coordinación) responden a clientes con necesidades diferentes (una pareja que quiere delegar todo y estar en manos de un profesional; una pareja que se organiza la boda por su cuenta, pero quiere una decoración bonita y la pareja Do It Yourself que solo quiere no tener que estar pendiente de todo el día B).
Debemos enfocarnos en hablarle al cliente al que va dirigido nuestro servicio, si le hablamos a todo el mundo, en realidad, no le estamos hablando a nadie.
Puede ser que tú solo ofrezcas dos servicios, que ofrezcas los tres que he nombrado y además las asesorías o que solo hagas organización integral, pero lo importante es que pienses si el cliente que te contrata el servicio A es el mismo que te contrata el servicio B.
Si la respuesta es que sí, que es el mismo, entonces tienes suficiente con una página.
Si la respuesta es que no (spoiler, este es el caso más habitual), necesitas una página para cada uno de ellos.
En tu(s) página(s) de servicio, habla principalmente de los beneficios de contratarte (seguridad, tranquilidad…) y no de características (8h de coordinación, 3 reuniones…), esto te ayudará a que las parejas perciban el valor real de tu trabajo.
Si tienes testimonios, este es el momento perfecto para enseñarlos. Serán el empujón final para que unos novios decidan contactarte o no, pero, ¡ojo! Si no los tienes, no los falsifiques. Esto se nota. Lo único que conseguirías es perder para siempre la confianza de tu potencial cliente y que decidan no trabajar contigo.
Al final de la página haz una llamada a la acción, si unos novios llegan hasta el final de tu página de servicios es porque le interesas, así que anímalos a ponerse en contacto contigo e incluye un botón que les lleve a tu agenda on-line para reservar una reunión como Calendly o TidyCal.
Portfolio
¿Necesitas un portfolio? De nuevo, ¡depende!
Si todavía no has realizado ninguna boda ni un shooting, es innecesario por el momento. Incluso si ya has hecho tu primer shooting, déjalo para más adelante y enseña esas imágenes tan preciosas en el resto de tu web.
Si ya tienes bodas que puedas publicar y shootings realizados, entonces te recomiendo encarecidamente que tengas un portfolio estratégico, un portfolio que se convierta en una de tus mejores herramientas de venta.
Lo primero que debes tener en cuenta para tu portfolio estratégico es que no debes poner todas las fotos de esa boda. Para empezar, porque es una violación de la privacidad de la pareja y, para continuar, porque nadie se verá 100 fotos de unos desconocidos.
Haz una selección de las 15-20 fotos más representativas de la boda y de tu trabajo (siempre con el consentimiento de los novios) y explica el concepto detrás de la organización y decoración.
Sé inteligente e incluye entre medias de las fotos el testimonio de la pareja.
Ponte en situación.
Unos novios están mirando tu portfolio y encuentran una boda que les chifla. A cada imagen sienten cada vez más que ellos quieren conseguir que su gran día sea tan espectacular como ese y estar tan felices como la pareja de las fotos.
Además, leen un testimonio de esos mismos novios de lo fácil que fue trabajar contigo y que no saben qué habrían hecho sin ti.
Y al final del todo, leen una llamada a la acción tal que:
«¿Vosotros también queréis una boda con tanta personalidad como la de Pepito y Juanita? Vamos a hacerla realidad.»
¿Qué crees que hará esa pareja? ¿Pasar de largo o reunirse contigo? Yo tengo claro que lo segundo 😉
Blog
El blog, cariño, no está muerto, ¡está más vivo que nunca!
Cuando tú buscas tus dudas en Google, verás que la mayoría de enlaces son a blogs en los que hablan justamente de eso. Cuando los novios busquen sus dudas, ¿quieres ser tú la que esté allí para ayudarlos y ganarte su confianza o vas a dejar que otro lo haga?
Piensa qué puntos de dolor tiene tu cliente ideal y escribe varios posts en los que los solucionas. Por ejemplo, si tú organizas bodas ecológicas, podrías escribir un post que fuera «5 maneras de reducir la huella de carbono de tu boda», si tu cliente ideal son personas que aman ir a conciertos y a festivales, podrías escribir un post que sea «Cómo convertir tu boda en un festival al más puro estilo Coachella y no morir en el intento».
¿Entiendes por dónde voy?
De esta manera conseguirás que las parejas que sean tu cliente ideal lleguen a tu web, les demostrarás que sabes de lo que hablas y que puedes ayudarles y, además, posicionarás tu web (cuantas más visitas recibes, más te posiciona Google). Yo lo veo un win-win.
Lo ideal es actualizar tu blog una vez por semana, pero como mínimo intenta subir un post cada 15 días.
Está muy feo entrar a un blog y ver que su último post es de hace un año, de hecho, puede dar a pensar que ese negocio ha quebrado.
Blog sí, pero blog abandonado no.
Páginas legales
En Europa es obligatorio unas páginas legales en la que informas al usuario de la web cómo son tratados sus datos, la política de la empresa, las cookies… y además deben estar siempre visibles. No voy a entrar mucho en este tema porque yo no soy abogado, pero quiero que sepas que las necesitas.
Página «Squeeze Page»
Soy diseñadora web estratégica, así que está claro que te voy a recomendar que utilices una estrategia de captación de suscriptores en tu web.
Una «Squeeze Page» es una página de venta de un recurso gratuito. Este recurso lo vendes a cambio de información en lugar de a cambio de dinero, véase el nombre y el correo electrónico de la persona que se lo va a descargar (y en tu caso, te recomiendo que pidas también la fecha aproximada de la boda).
Imagina que una pareja entra a tu web y ve que regalas una guía en la que explicas cómo organizar una boda eco sin tener que vender un riñón en el mercado negro. Si esta pareja quiere realizar una boda eco (y por tanto, es tu cliente ideal) se la va a descargar seguro.
Rellenará un formulario con su nombre, mail y fecha de la boda y, entonces, la recibirá en su bandeja de entrada.
Tú ahora tienes información (y la información es poder). Tú ahora sabes que Rocío se casa en junio de 2024, quiere una boda ecológica y tienes un mail con el que contactarle. Es el momento de enviarle más información de valor para que se acabe de dar cuenta de cuánto te necesita.
¿Esto hay que hacerlo manual? Nanai, te hablo más de esto en otro post, pero te avanzo que esto se hace de forma automática y va a conseguirte más reuniones con potenciales clientes sin que tú muevas un dedo.
Página de «Inicio»
Esta es la primera página que verán los visitantes de tu web. Causar una buena primera impresión es primordial, así que dale el cariño que se merece a esta página.
La primera pantalla, sin hacer scroll (es decir, sin deslizar hacia abajo), tiene que dejar muy claro quién eres, a quién ayudas y cómo lo haces, es decir, tu nombre comercial, quién es tu cliente ideal y que que eres wedding planner.
En mi página de inicio verás mi logo y mi cara (quien soy) y el texto «Ayudo a wedding planners como tú (a quién ayudo) a captar más clientes gracias a una web bonita, estratégica y automatizada (cómo lo hago)», de esta manera respondo a las 3 preguntas.
A continuación, habla de los beneficios de contratarte, luego una pequeña sección de «Sobre mí» (con un botón que lleve a la página de «Sobre mí»), un resumen de tus servicios (enlazado a la(s) página(s) de «Servicio») y este también es un sitio ideal para poner testimonios (recuerda, testimonios reales).
Al final, incluye una llamada a la acción enlazada a tu página de servicios. Ya sabes, si llegan hasta el final es que les gustas 😉
Estas son todas las páginas que yo considero imprescindibles.
Como ves, no te he puesto una página de testimonios (porque ya los hemos repartido en la(s) página(s) de «Servicio», de «Inicio» y en el respectivo portfolio de esos novios) ni una de preguntas frecuentes (estas deben ir en su respectiva página de servicio). No es necesario tener montones de páginas si el contenido de estas lo podemos repartir de forma estratégica por el resto de nuestra web.
¿Tienes ya claro cuántas páginas necesita tu web?
Si ahora ya lo tienes claro y quieres que te ayude a captar más clientes con una web bonita, estratégica y automatizada, ¿nos tomamos un café juntas?